Primero, ¿a qué nos referimos con Fidelización?, es la actividad en la que nos esforzamos para que «enganchar» a nuestros clientes y que de alguna forma se conviertan en embajadores de nuestra marca.
Para ésto, el cliente pasa por cuatro fases:
Ilusión: Es la fase donde utilizamos la comunicación para llegar a ellos, pero omitiendo frases que actualmente ya no tienen credibilidad alguna, como: «los mejores precios», «somos los mejores del mercado», «no encontrarás mejor solución», etc. Es cuando comienza a generar una ilusión de poder adquirir nuestro producto o servicio.
Post-Compra: Consiste en darles un seguimiento. Es el momento donde nos enfocamos en que el cliente sepa que lo conocemos de manera en la que se sienta mucho más allegado con nuestra marca, ésto puede ser a través de un boletín especial, promoción exclusiva, una actividad, etc. Un ejemplo de alguien que lo hace muy bien, es Amazon al dar la importancia que te mereces como consumidor.
Confianza: Es donde se logra que el cliente se sienta parte de nosotros, puede ser a través de sugerencias o invitaciones a ciertos eventos. Es el desarrollo para que se sientan parte de la empresa.
Identificación: Es la fase que todas las empresas desean conseguir. Es algo que empresas que como Apple, Huawei o algunas marcas de automóviles han logrado. El cliente que se siente identificado proyecta un gran deseo y respeto por la marca que termina compartiendo a través de sus redes sociales o con personas que lo rodean.
Si estás desarrollando un negocio de eCommerce te recomendamos ampliamente seguir estas fases y te aseguramos que tendrás grandes éxitos.